En farmacología, una droga es toda materia que posea una
composición química o sustancias químicas que proporcionan un efecto
farmacológico útil en terapéutica.
Según la Organización
Mundial de la Salud, una droga es toda sustancia que, introducida en el
organismo por cualquier vía de administración, puede alterar de algún modo el
sistema nervioso central del individuo que las consume.
Las drogas provocan la drogodependencia, también llamado drogadicción o farmacodependencia, es un problema de salud causado por el uso frecuente de sustancias adictivas que afectan el sistema nervioso central y las funciones cerebrales, que producen alteraciones en el comportamiento, en la percepción, en el juicio y en las emociones.
El consumo repetido de
drogas da lugar a que el organismo se acostumbre físicamente. Las drogas
interfieren en los mecanismos neurológicos y biológicos, en particular en las
sustancias químicas que transmiten los mensajes entre las células del sistema
nervioso. Cuando el organismo recibe regularmente sustancias morfínicas de
origen externo la producción
interna de endorfinas disminuye. Las sensaciones de placer no pueden provenir,
en una determinada fase de la intoxicación, más que de un aporte externo. Los
efectos de las drogas sobre el cerebro se caracterizan por: confusión mental,
delirio, alucinaciones y comportamiento generalmente agresivo.
Para muchas personas
consumir drogas es una salida fácil pues en ella encuentran un falso refugio
que los aparta de la realidad y sin darse cuenta van cayendo en un abismo que
muchas ocasiones tiene fatales consecuencias.
El uso de drogas puede
conferir cierta categoría social, permite el ingreso en un grupo social
determinado o es causa de aprobación o admiración en su entorno. A veces este
refuerzo social mantiene la conducta experimental del individuo, hasta que se
llega a apreciar el efecto primario de la droga o se toleran los efectos
aversivos iníciales de la droga. Esto es muy típico de drogas socialmente
aceptadas, como los efectos iníciales del tabaco.